Ahora todos nuestros audios incluyen una frase subliminal que refuerza el efecto de las frecuencias en nuestro cuerpo. La frase es: “AL ESCUCHAR ESTE AUDIO ESTOY SANANDO MI CUERPO Y MI MENTE”
Escucha este binaural una o dos veces al día para ayudar a tu cuerpo a combatir la resistencia a la insulina. Escúchalo con auriculares y el volumen bajo. Se puede escuchar el audio completo una o dos veces al día hasta que se solucione esta situación y todo funcione con normalidad, o puedes seguir escuchándolo de vez en cuando para mantener el páncreas en perfecto estado de salud.
Hay que decir que todos los binaurales o isocrónicos se pueden escuchar aunque no tengas la enfermedad para la que son destinados, porque lo que consigues al escuchar las diferentes frecuencias es poner en un perfecto estado de salud las células de todo tu cuerpo.
Este binaural está diseñado para ayudar al cuerpo a reparar la situación de resistencia a la insulina.
La resistencia a la insulina es una condición que significa que el cuerpo no es capaz de controlar correctamente los niveles de azúcar en la sangre.
Si no se controla, la resistencia a la insulina puede provocar prediabetes, síndrome metabólico o diabetes tipo 2.
Para entender qué es la resistencia a la insulina, también conocida como prediabetes, primero debemos hablar de la función de la insulina.
Cuando comes alimentos, el cuerpo los convierte en azúcares alimenticios. La insulina es una hormona que libera el páncreas y les indica a las células que se abran y absorban ese azúcar para convertirlo en energía. Si tienes resistencia a la insulina, las células no reaccionan ni se abren, lo que causa un nivel excesivo de azúcar en la sangre. Con el tiempo, el páncreas sigue tratando de regular el nivel de glucosa en la sangre y genera cada vez más insulina hasta que se agota y ya no puede producir grandes cantidades de esta hormona. Como resultado, los niveles de glucosa en la sangre aumentan hasta alcanzar el rango diabético.
¿Quien puede tener resistencia a la insulina?
Las personas que pueden presentar más riesgo de resistencia a la insulina son las que se someten a consumir “me/(di/(ca/(men/(tos” como esteroides, antisépticos, los consumidos para la inmunodeficiencia y otros…, Y las personas que comen ciertos alimentos como veremos ahora.
También hay otras afecciones asociadas a la resistencia a la insulina, como la apnea obstructiva del sueño, la enfermedad del hígado graso, el síndrome de ovario poliquístico, el síndrome de Cushing y los síndromes de lipodistrofia, un conjunto de afecciones que causan una pérdida anormal de grasa. Por lo tanto, tener demasiado o muy poco tejido graso en el cuerpo puede deberse a la resistencia a la insulina.
Las personas con sobrepeso y obesidad pueden presentar más posibilidad de resistencia a la insulina, la falta de ejercicio, tener colesterol elevado y la tensión arterial alta, también las personas con niveles de glucocorticoides elevados en sangre, ya sea por situaciones de estrés prolongado, ciertas patologías (síndrome de Cushing, por ejemplo) o por tratamiento con corticoides.
La verdad es que cada vez hay más personas con resistencia a la insulina y la mayoría no lo saben, esto es debido al consumo de la dieta actual que han implantado, y las personas por comodidad recurren a alimentos ya preparados en las industrias.
Los alimentos que más resistencia a la insulina crean son los que se descomponen en glucosa en sangre y en ácido dentro del cuerpo, como son: el azúcar, los refrescos y las bebidas azucaradas o edulcoradas, salsas comerciales, alcohol, embutidos, nugguets, salchichas y demás preparados de perfil nutricional nulo, los Snacks dulces y salados, el maíz, el pan, la bollería, las pastas, pizzas, arroz, avena y demás cereales, también el queso, la leche y derivados lácteos. Los cereales en general tapizan las vellosidades intestinales con su pegamento y crean intestino permeable, entre otras lesiones. Con lo cual, habría que evitar todos estos productos y toda la comida procesada en general, y evitar todo lo que lleve sal añadida, ya que la sal usada es química, hay que usar sal natural ecológica añadida en casa a los alimentos naturales.
Hay que preferir para comer alimentos naturales hechos en casa, como: todas las verduras y hortalizas, frutas, huevos, frutos secos naturales, algunas semillas, carnes de calidad criadas en pastos, pescados salvajes de calidad, evitando los pescados inyectados o con químicos. También se pueden comer algunas legumbres. Comer grasas saludables como el aceite de oliva, aceite de coco y otros aceites no industriales.
Si tienes resistencia a la insulina, apégate a una dieta rica en grasas saludables, fibra y fuentes de proteínas magras.
¿Cuáles son los síntomas de la resistencia a la insulina?
En general, las personas que tienen resistencia a la insulina no presentan ningún síntoma, por lo que esta afección suele detectarse durante un examen de salud anual o a través de un análisis de sangre de rutina.
Hay algunos signos de la resistencia a la insulina a los que el médico puede prestar atención, como una cintura que mide más de 40 pulgadas (unos 100 cm) en los hombres y más de 35 pulgadas (unos 90 cm) en las mujeres; fibromas blandos o zonas de piel oscura y aterciopelada (lo que se conoce como acantosis nigricans); una lectura de la presión arterial de 130 sobre 80, o superior; un nivel de glucosa en ayunas de 100 miligramos por decilitro o superior; un nivel de glucosa en la sangre de 140 miligramos por decilitro o superior después de la prueba de carga de glucosa; un nivel de hemoglobina glucosilada A1c del 5,7 % al 6,3 %; un nivel de triglicéridos en ayunas superior a 150 miligramos por decilitro; o un nivel de colesterol de lipoproteínas de alta densidad inferior a 40 miligramos por decilitro en los hombres e inferior a 50 miligramos por decilitro en las mujeres.
Algunos síntomas comunes de diabetes pueden ser: necesidad de beber con más frecuencia, un aumento considerable de la orina, más apetito, pérdida o aumento de peso, cansancio, entre otros…
¿Cómo tratar la resistencia a la insulina?
Puedes tomar medidas para ayudar al cuerpo a ser más receptivo a esta hormona. Escucha a tu cuerpo, reduce el estrés, lleva una alimentación saludable y haz actividad física moderada.
Incorpora alimentos saludables, como frutas, verduras, frutos secos, legumbres y proteínas magras, a tus comidas. También considera incorporar el ejercicio y el movimiento a tu rutina diaria de una forma que te haga sentir bien. Toma agua de mar para alcalinizar tu cuerpo o bebe agua con sal gruesa natural. sal de la que es oscura, y se aglomera o se apelmaza como antiguamente (de venta en herbolarios).
Evita el azúcar y los sustitutos. El objetivo principal es consumir los alimentos tal cual son, con su sabor propio. Los edulcorantes enmascaran el sabor de los alimentos y destruyen tu salud.
Hacer ayunos intermitentes te ayuda muchísimo a vencer la resistencia a la insulina.
Toma medidas para mejorar tu higiene del sueño acostándote a la misma hora todas las noches, reduciendo la exposición a la luz azul por la noche.
Si tienes resistencia a la insulina, además de eliminar de tu dieta todo lo que la produce, sería conveniente que uses este audio para la resistencia a la insulina y el de síndrome metabólico, incluso el del páncreas, aquí están los link:
https://autogestionatusalud.com/producto/binaural-combatir-sindrome-metabolico/
Cuando en la vida tenemos alguna dificultad, nos estresamos. Nuestro cuerpo reacciona a este estrés poniendo a disposición recursos adicionales (energía, atención) porque entiende que existe una situación de emergencia que se debe atender. Bajo ciertas condiciones, una situación particular puede generar que un estrés se quede “anclado” en el cuerpo, transformándose de alguna manera en un estado permanente de emergencia, y es esto lo que genera los síntomas y enfermedades.
Y ahora abordaremos los tipos de estrés asociados a la diabetes y la resistencia a la insulina.
La resistencia a la insulina es, físicamente, cuando los tejidos (principalmente el hígado y los músculos), dejan de responder a la hormona insulina. En consecuencia, el azúcar en la sangre aumenta. Hay que recordar que el azúcar en sangre debe estar en ciertos niveles, y cuando aumenta en demasía es peligroso para la salud.
La diferencia de la resistencia a la insulina con la diabetes es que, en esta última, el páncreas produce muy poca o nada de insulina. En cualquiera de los 2 casos, el resultado físico es el mismo: el azúcar en la sangre aumenta en exceso.
En el caso de la biodescodificación no hay diferencia práctica entre la resistencia a la insulina y la diabetes.
Desde la biodescodificación, el azúcar es metáfora del amor, de la dulzura. Y la sangre es metáfora de la familia. Entonces, es como si yo no quisiera tomar “el amor de la familia” porque es, de alguna manera, peligroso. No dejo que entre en mí, lo resisto.
Otra situación que he verificado en sesiones es que “quisiera agregar a alguien de mi familia el amor que no tiene” (puede ser a una o más personas), y entonces elevo el azúcar en la sangre.
También habrá nociones complementarias de miedo y de resistencia. El amor “se resiste”.
Puede haber una dificultad en relación a un proyecto a largo plazo. Por ejemplo, una mujer que siente que el amor es peligroso desde que vivió cierta dificultad con su marido, momento en que para ella “se acaba el proyecto de familia”.
La diabetes/resistencia a la insulina y el amor
Si la diabetes es resistencia a algo o a alguien que nos produce temor, rechazo, contrariedad, injusticia, su contrario sería la aceptación. Pero, ¡cuidado!, porque la aceptación no significa que nos quedaremos en esa situación de peligro, de desamor o de frustración.
La aceptación significa darse cuenta de lo que está sucediendo, que es el primer paso para luego pasar a la acción y hacer un cambio en la vida.
Por ello muchas veces la resistencia a la insulina, tiene relación con haber perdido la dulzura del amor ya sea porque no se recibe amor, porque hay un fracaso en el amor, o porque no te permites ser amado o amada. Entonces buscarás el dulzor en los alimentos, el placer de comer para compensar lo que no se puede recibir en lo afectivo. Y se recurre al azúcar o a los carbohidratos que se descomponen en glucosa en sangre igual. Los lácteos también se descomponen en glucosa en sangre.
El páncreas va a necesitar más y más insulina para introducir la glucosa en las células, hasta que se agota y no producirá más o será insuficiente, de tal manera que la glucosa se quedará acumulada en la sangre. Y así la personas tendrá suficiente glucosa para la acción de defenderse o huida que no puede hacer.
La resistencia es aguantar una situación o persona tanto, que se llega a trasformar las células de Langerhans encargadas de producir la insulina en el páncreas.
Es frecuente encontrar la sensación de ser vigilados y perseguidos en algunos diabéticos, ya sea porque está ocurriendo en realidad, o porque se imaginan que eso sucede.
El cerebro necesita de 6 a 7 minutos para sintonizarse con la onda que le estamos metiendo a través de los auriculares.
Algunas veces es suficiente escuchar un sonido binaural solo durante 10 minutos para que sea efectivo, hay personas que aguantan perfectamente los binaurales escuchándolos más rato, pero otras personas sienten molestias si los escuchan más de 15 minutos.
Lo ideal es escuchar los binaurales con auriculares, con audífonos para que el batido sea más efectivo en el cerebro, pero las personas que tengan mucho estrés y tensión, o electricidad estática acumulada en su cuerpo pueden sentir molestias al escuchar los binaurales.
También si tus nervios auditivos están en mal estado en uno de los dos oídos pueden causarte alguna molestia, y en estos casos se pueden escuchar con unos altavoces estéreo y sin auriculares, el efecto es menor pero también se obtiene beneficio de esta manera.
No es aconsejable escuchar frecuencias BINAURALES o ISOCRÓNICAS en personas que sufran convulsiones o epilepsia, que tengan puestos aparatos marca-pasos, tampoco en personas con trastornos severos de la personalidad. Las mujeres embarazadas los podrán escuchar solo por consejo de su médico.
Puedes escuchar este sonido en cualquier momento del día, pero es muy recomendable escuchar estos sonidos tumbado y con los ojos cerrados, ya que algunas personas tienen hiperactividad, estrés y están demasiado apresuradas por sus quehaceres diarios y en ese estado existe un choque interno entre la energía mental de la persona y la energía que nos aporta la frecuencia binaural intentando bajar la frecuencia de las ondas cerebrales. Por un lado nuestro cerebro pretende ser resolutivo con la tarea que estamos realizando y con las tareas que tenemos en mente para después (con mucha actividad cerebral) y el binaural pretende lo contrario, bajar la frecuencia para dejarnos en una determinada vibración que no se corresponde con toda la cantidad de cosas que tenemos en la mente. Y aunque el binaural siempre hace efecto a nivel físico y emocional, pero en el proceso de encaje tiene que luchar con nuestra contradicción mental que vivimos al estar tan activos. Por eso las personas que sientan algún tipo de molestia como tensión en la nuca, en el cuello, jaqueca, nerviosismo, angustia, ansiedad o cualquier síntoma al escuchar un binaural es conveniente que deje todo lo que está haciendo y se tumbe a escuchar tranquilamente el binaural con los ojos cerrados para no sentir ningún tipo de molestia. Y estas personas que ya están de por si demasiado tensas es conveniente que descarguen sus pies a tierra.
Escucha esta frecuencia con los auriculares con el volumen más bien bajo, para no generar molestias en tus oídos.
AVISOS GENERALES, LIMITACIÓN DE RESPONSABILIDAD
No se asume ninguna responsabilidad de los usos y aplicaciones de los audios, ni por el comportamiento derivado del uso que se haga de la información contenida en este artículo.
La información proporcionada y la aplicación de las técnicas descritas en este artículo tienen únicamente carácter informativo y no está pensada para reemplazar ningún tipo de tratamiento médico, psicológico o de cualquier otro tipo. Bajo ningún concepto se aconseja abandonar un tratamiento prescrito por profesionales de la medicina. No es, pues, un acto médico. Para cualquier duda consultar a su médico especializado.